Un ERTE es un expediente de regulación temporal de empleo, y se utiliza como medida para solventar situaciones de crisis en las empresas.
En algunos casos, puede ser que una persona que se encuentre en ERTE consiga trabajo en otra empresa en la que se encuentre en situación de alta en la Seguridad Social. En estos casos, la persona que se encuentre en esta situación deberá notificarlo a su empresa que lo incluyó en el ERTE.
Es importante tener en cuenta que, al tener un trabajo en otra empresa, la persona pasa a ser trabajador activo, por lo que no podrá seguir cobrando la prestación del ERTE. Por tanto, el trabajador deberá dar de baja su solicitud de ERTE ante su empresa anterior.
En cualquier caso, el trabajador deberá seguir cumpliendo los requisitos y obligaciones que le correspondan según su nuevo contrato laboral y la normativa de la Seguridad Social.
El ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) es un mecanismo que ha permitido a muchas empresas adaptarse a la situación de incertidumbre generada por la pandemia.
Pero, ¿qué sucede si durante el periodo en el que estamos cobrando el ERTE, nos contrata otra empresa?
La respuesta es sencilla, si estamos en una situación de ERTE, nuestro contrato laboral sigue en vigor, pero nuestros derechos laborales quedan congelados. Por lo que, en principio, podemos acceder a la oferta laboral de otra empresa y darnos de alta en la Seguridad Social.
En el momento en el que comenzamos a trabajar para la nueva empresa, el contrato firmado en el anterior empleo quedará suspendido, eliminando así la situación de ERTE en la empresa anterior. Por tanto, el trabajador queda desvinculado de la empresa que lo contrató en primer lugar.
Es importante tener en cuenta que se perderán derechos adquiridos en la empresa anterior, como la antigüedad, las condiciones laborales establecidas, entre otros.
En conclusión, si estamos en ERTE y se nos presenta la opción de trabajar en otra empresa, podemos optar por ello sin problema y cumplir nuestro contrato laboral, pero debemos tener en cuenta las consecuencias que ello puede acarrear en cuanto a derechos y antigüedad.
El ERTE es un Expediente de Regulación Temporal de Empleo que se utiliza para reducir o suspender temporalmente la actividad laboral en una empresa debido a circunstancias extraordinarias, como la crisis económica o una pandemia, como la actual. Si te encuentras en una situación de ERTE, es posible que te preocupe la cantidad de días de paro que te quitarán como consecuencia de esta medida.
En primer lugar, es importante entender que el paro y el ERTE son conceptos distintos. El paro es una prestación que se otorga a los trabajadores que han perdido su empleo de forma involuntaria, mientras que el ERTE es una medida temporal que permite a las empresas suspender o reducir temporalmente la actividad laboral. Aunque la mayoría de las personas que se encuentran en una situación de ERTE tienen derecho a cobrar el paro, esto no significa necesariamente que se les descuenten días de paro.
Si eres beneficiario de un ERTE, debes tener en cuenta que no se te descontarán días de paro de forma automática. Esto dependerá de la duración y del tipo de ERTE al que te hayas acogido. Si se trata de un ERTE de suspensión de actividad, no se te descontarán días de paro durante los primeros 180 días, mientras que si se trata de un ERTE de reducción temporal de jornada, se te descontará el paro en función del número de días que hayas trabajado.
En conclusión, si estás en una situación de ERTE, es importante que consultes con tu empresa y con el SEPE para conocer cuántos días de paro te quitarán, si es que te los quitan, y para saber durante cuánto tiempo podrás acoger a esta medida temporal. Si tienes cualquier duda o cuestión respecto a tu ERTE y cómo te afecta en cuanto a los días de paro, no dudes en preguntar a los expertos.
El procedimiento para informar al SEPE de que empiezas a trabajar mientras te encuentras en un ERTE es muy sencillo. Lo primero que hay que hacer es entrar a la página web del SEPE y aportar la información necesaria en la sección correspondiente. Es importante que comuniques esta situación lo antes posible, ya que cualquier retraso en el aviso puede dar lugar a problemas en el futuro.
Una vez que hayas accedido a tu perfil de usuario en la web del SEPE, tendrás que identificarte mediante tu DNI o con tus credenciales electrónicas. A continuación, debes buscar la sección donde se encuentran las opciones para informar de tu nueva situación laboral. Allí, deberás proporcionar la información necesaria, que incluirá tu nuevo contrato de trabajo y otros documentos que el SEPE te solicitará para comprobar los datos que has proporcionado.
Es importante que estés al día con todas las obligaciones que se derivan de este proceso y que tengas presente que el SEPE puede llamarte en cualquier momento para comprobar la veracidad de los datos que hayas aportado. De todas formas, el SEPE también se encargará de actualizar la información correspondiente en su propia base de datos y, si fuera necesario, ajustará tus prestaciones según las nuevas circunstancias laborales.
En definitiva, informar al SEPE de que estás trabajando en una situación de ERTE es fundamental para mantener la transparencia en tus obligaciones laborales y, al mismo tiempo, para proteger tus derechos laborales y prestaciones sociales. Con un simple trámite online, podrás comunicar al SEPE esta nueva situación y evitar problemas en el futuro. ¡No lo dudes más y actualiza tu situación laboral cuanto antes!
El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) es una medida que las empresas pueden tomar para superar situaciones económicas difíciles sin tener que despedir a sus empleados. Esto significa que los trabajadores afectados por un ERTE tienen suspensión temporal del contrato laboral y no pueden ser despedidos durante este periodo.
¿Pero qué ocurre en cuanto a la cotización de los empleados? En términos generales, durante los meses que dura el ERTE, los trabajadores seguirán cotizando a la Seguridad Social, pero con unas condiciones específicas. La base reguladora se reduce al 70% de la base de cotización correspondiente al mes anterior al inicio del ERTE, aunque seguirán teniendo todas las coberturas y prestaciones.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que las bonificaciones y reducciones en las cotizaciones para los empleados afectados por un ERTE varían en función de la situación específica de cada trabajador. Por ejemplo, aquellos que pertenezcan a sectores especialmente afectados por la crisis del coronavirus pueden disfrutar de exenciones en las cotizaciones durante varios meses. Además, las empresas también pueden solicitar exenciones en las cuotas a la Seguridad Social cuando tienen trabajadores afectados por ERTE.
En resumen, la cotización de los empleados afectados por un ERTE se ve modificada durante el tiempo que dura la suspensión temporal del contrato, con una reducción de la base reguladora y bonificaciones o exenciones en algunos casos . Es importante que tanto la empresa como los trabajadores se informen adecuadamente sobre cómo se verán afectados por el ERTE en términos de cotización y de sus derechos y obligaciones durante esta situación.