Los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo, mejor conocidos como ERTEs, han sido sin duda una herramienta fundamental para muchas empresas durante la pandemia, permitiéndoles reducir la carga económica de sus trabajadores en momentos de bajada de la actividad.
Sin embargo, es comprensible que muchos se pregunten qué pasará con ellos en 2023, cuando se prevé que la situación sanitaria se normalice y la economía se recupere.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que los ERTEs son una medida temporal, por lo que no pueden ser perpetuos.
Por lo tanto, es de esperar que se vayan reduciendo progresivamente a lo largo de 2022 y desaparezcan por completo en 2023.
Por supuesto, esto dependerá en gran medida de la evolución de la situación epidemiológica y económica. Si la recuperación se agrava o se retrasa, es posible que los ERTEs se prorroguen más allá de lo esperado.
Además, cabe destacar que el fin de los ERTEs no significará necesariamente el fin de las ayudas a las empresas. Es probable que se establezcan otras medidas de apoyo para aquellos sectores que hayan sufrido más en la crisis, como el turismo o la hostelería.
En definitiva, aunque es difícil prever con exactitud cómo evolucionarán los ERTEs en 2023, es de esperar que se vayan reduciendo progresivamente y desaparezcan por completo a medida que la economía se recupere. Por otro lado, es probable que se establezcan otras medidas de apoyo para los sectores más afectados por la crisis. Lo que está claro es que, a medida que avance la vacunación y se instaure la normalidad (si es que se establece la nueva normalidad), será necesario pensar en nuevas ayudas económicas para otras áreas que se podrían haber visto afectadas.
Un ERTE, o Expediente de Regulación Temporal de Empleo, es una medida adoptada por las empresas para reducir temporalmente la jornada laboral o suspender contratos de trabajo. Desde su implementación en España, una de las preguntas más frecuentes es: ¿Cuánto se cobra en un ERTE 2023?
La respuesta a esta pregunta puede variar dependiendo de varios factores, como la duración del ERTE, la situación laboral del trabajador y la empresa en sí misma. En general, los trabajadores afectados por un ERTE pueden recibir el 70% u 80% de su salario base, dependiendo de si el ERTE es considerado por fuerza mayor o no.
Es importante mencionar que el porcentaje de salario recibido durante un ERTE puede variar según el convenio colectivo de la empresa, por lo que es recomendable que el trabajador revise su contrato laboral para conocer cuál es el porcentaje que le corresponde.
Además, cabe destacar que el periodo de duración de un ERTE no puede superar los 24 meses, por lo que es esencial tener un plan financiero adecuado para hacer frente a esta situación temporal.
En resumen, la cantidad que se cobra en un ERTE 2023 dependerá de varios factores, incluyendo el tipo de ERTE, el convenio colectivo y el salario base del trabajador. Es fundamental estar informado sobre las condiciones específicas de cada ERTE y tener un plan financiero adecuado para hacer frente a esta situación temporalmente.
Un ERTE ETOP (Expediente de Regulación Temporal de Empleo por causas econonómicas, técnicas, organizativas o productivas) afecta directamente al trabajador, ya que se encuentra suspendido temporalmente de su contrato laboral. Durante este periodo, el trabajador no estará en activo y no percibirá su salario completo, lo que puede generar preocupación e incertidumbre en la persona.
Por otro lado, el trabajador tendrá derecho a recibir una prestación por desempleo correspondiente al tiempo que dure el ERTE. Esta prestación puede variar en función de la antigüedad del trabajador en la empresa y otros factores específicos de su caso particular, pero en cualquier caso, no suele ser equivalente al salario que el trabajador venía percibiendo.
Otro aspecto relevante a tener en cuenta es que, durante el tiempo que dure el ERTE, el trabajador perderá algunos de sus derechos laborales como el derecho a la formación o la promoción profesional. Además, el trabajador tendrá que estar disponible para ser llamado a trabajar en cualquier momento, por lo que se creará una situación de incertidumbre y falta de estabilidad laboral en el trabajador que puede ser difícil de gestionar.
En resumen, un ERTE ETOP puede afectar gravemente al trabajador, ya que se suspende temporalmente su contrato laboral y no percibe su salario completo. Sin embargo, el trabajador tendrá derecho a una prestación por desempleo y deberá permanecer disponible en caso de que sea llamado a trabajar. Es importante que el trabajador conozca sus derechos y esté al tanto de las novedades en su situación laboral, para poder gestionar de la mejor manera posible esta situación difícil y retomar su actividad laboral en cuanto sea posible.
El ERTE es una figura laboral que ha tenido gran relevancia en los últimos meses debido a la crisis provocada por la pandemia del Covid-19. En términos generales, un ERTE es un expediente de regulación temporal de empleo que permite a una empresa suspender temporalmente los contratos laborales de sus trabajadores.
En cuanto a su duración, no existe un límite máximo establecido para estar en un ERTE. Sin embargo, la empresa debe estar atenta a la normativa vigente y a las comunicaciones que reciba por parte de la autoridad laboral competente, quien podrá establecer una duración máxima según las circunstancias.
En cualquier caso, el ERTE es una medida temporal, y por tanto debe tener una duración limitada en el tiempo. Las empresas deben justificar la necesidad de utilizar esta herramienta, y una vez superada la situación que lo motivó, deberán reincorporar a sus trabajadores a sus puestos de trabajo habituales.
Es importante tener en cuenta que durante el periodo de suspensión temporal del contrato, los trabajadores podrán solicitar el paro y recibir una prestación económica que les permita mantener su sustento familiar. Además, los derechos laborales como la antigüedad o las vacaciones se siguen acumulando durante el tiempo en el que se esté en un ERTE.
En resumen, la duración máxima de un ERTE no está establecida, pero su uso debe ser justificado y temporal. Los trabajadores pueden recibir una prestación mientras dure la suspensión temporal y sus derechos laborales siguen acumulándose durante este periodo.
La pregunta sobre ¿Cuántos Ertes puede hacer una empresa? es muy frecuente en estos tiempos de incertidumbre en el ámbito laboral debido a la crisis sanitaria mundial.
En España, las empresas pueden solicitar varios Ertes según la necesidad de suspender la actividad de los trabajadores, pero siempre y cuando cumpla con las normativas legales establecidas.
Es importante destacar que cada Erte debe estar justificado y ser debidamente autorizado por las instancias correspondientes.
Por tanto, no existe un límite establecido de cuántos Ertes puede hacer una empresa, aunque se debe tener en cuenta que la administración estará analizando la situación y verificar si se cumple con las normas necesarias para evitar posibles abusos de esta herramienta.
En resumen, las empresas pueden solicitar varios Ertes pero siempre deberán estar justificados y cumplir con las normativas legales como forma de garantizar los derechos de los trabajadores y evitar posibles excesos en su aplicación.