¿Qué es un ERTE por limitacion?

Un ERTE por limitación es una modalidad de Expediente de Regulación Temporal de Empleo que se aplica en aquellas empresas que, debido a una situación externa imprevisible, no pueden mantener su actividad laboral en su totalidad.

Para acceder a un ERTE por limitación, la empresa debe demostrar que ha sufrido una disminución significativa de su volumen de negocio o ingresos. Esto puede ser consecuencia de una crisis económica, una catástrofe natural, una pandemia, entre otros.

El objetivo principal del ERTE por limitación es evitar el despido masivo de trabajadores, permitiendo reducir las horas de trabajo o suspender el contrato temporalmente. De esta manera, la empresa puede recuperarse de la situación y continuar con su actividad en un futuro próximo.

Es importante destacar que durante el tiempo en que los trabajadores estén afectados por el ERTE por limitación, tendrán derecho a una prestación por desempleo y la empresa deberá abonarles una compensación económica. Además, la duración del ERTE por limitación está limitada a un máximo de 6 meses, aunque puede ser prorrogado si persiste la situación que lo originó.

En definitiva, el ERTE por limitación es una herramienta que permite a las empresas afrontar situaciones adversas sin tener que despedir a sus trabajadores y dejándolos en situación de desempleo. Sin embargo, es importante cumplir con las normativas legalmente establecidas para evitar perjuicios a los trabajadores y garantizar la equidad de la empresa.

¿Cuántas prorrogas puede tener un ERTE?

El Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) es una medida que permite a las empresas suspender temporalmente los contratos laborales de sus trabajadores.

Desde que se decretó el estado de alarma en España, el gobierno ha autorizado varias prórrogas para los ERTE, con el objetivo de ofrecer alivio a las empresas que se han visto afectadas por la pandemia del COVID-19.

La primera prórroga fue de tres meses, pero se han otorgado extensiones posteriores, cada una por un período de un mes.

Actualmente, se encuentra en vigor la quinta prórroga, que cubre los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2020.

Es importante destacar que, aunque se han autorizado varias prórrogas, el número máximo no está definido.

Depende de la evolución de la situación sanitaria y económica en el país, así como de las necesidades de las empresas y trabajadores afectados por el ERTE.

No obstante, se espera que se sigan otorgando prórrogas mientras persista la situación de incertidumbre debido a la pandemia.

En cualquier caso, es importante que las empresas y trabajadores afectados estén atentos a las novedades y a las medidas que puedan aplicar las autoridades para hacer frente a la crisis actual.

¿Cuánto tiempo puede durar un ERTE ETOP?

En estos tiempos de incertidumbre laboral provocada por la pandemia del COVID-19, muchas empresas han recurrido a la implementación de un ERTE ETOP con la finalidad de evitar despidos y mantener la continuidad de sus operaciones.

Un ERTE ETOP, según la normativa establecida por el Gobierno español, es una medida temporal de suspensión de contratos laborales en aquellas empresas que, como consecuencia de la crisis sanitaria, han visto disminuida su actividad económica.

La duración máxima de un ERTE ETOP es de 6 meses, pudiendo ser prorrogado por un periodo adicional de otros 6 meses previa autorización del Servicio Público de Empleo Estatal.

Es importante destacar que, durante el periodo de vigencia del ERTE ETOP, las empresas tienen la obligación de elaborar un plan de reincorporación de los trabajadores afectados por la medida, el cual debe ser negociado previamente con los representantes de los trabajadores.

En resumen, un ERTE ETOP puede durar un máximo de 12 meses, pero su prolongación está sujeta a la autorización del SEPE. Las empresas deben contar con un plan de reincorporación de los trabajadores y negociarlo con los representantes de los mismos.

¿Cuándo se considera ERTE?

El Expediente de Regulación Temporal de Empleo, conocido como ERTE, se considera cuando una empresa se ve obligada a reducir temporalmente la jornada laboral o suspender temporalmente los contratos de trabajo de sus empleados.

Este tipo de situación puede darse por diferentes motivos, como una caída en la demanda de los productos o servicios de la empresa, una restricción temporal por parte de las autoridades o simplemente por una situación económica delicada que impide mantener el ritmo de trabajo del personal.

Es importante destacar que el ERTE es una medida temporal que se aplica en situaciones excepcionales, para evitar despidos masivos y mantener la estabilidad laboral en la empresa. Por lo tanto, se debe demostrar que se trata de una situación temporal y que existe una previsión de recuperación económica en un plazo razonable de tiempo.

Para llevar a cabo un ERTE, la empresa debe seguir un procedimiento legal establecido, que incluye una consulta previa con los representantes de los trabajadores y la autorización por parte de la autoridad laboral. Además, los trabajadores afectados por el ERTE tienen derecho a recibir una compensación económica por el tiempo que dure la suspensión o reducción de su jornada laboral.

En resumen, el ERTE se considera cuando una empresa se ve obligada a reducir temporalmente la jornada laboral o suspender temporalmente los contratos de trabajo de sus empleados debido a una situación excepcional y temporal. Es importante seguir el procedimiento legal establecido y garantizar los derechos de los trabajadores afectados por el ERTE.

¿Qué es el ERTE parcial?

El ERTE parcial es una medida adoptada por las empresas para adaptarse a situaciones de crisis o necesidades temporales de ajuste de plantilla, sin tener que recurrir a despidos completamente. Esta herramienta permite que las empresas reduzcan la jornada laboral de los trabajadores, así como sus salarios de forma temporal.

El ERTE parcial se ha convertido en una opción cada vez más común en el contexto actual, en el que muchas empresas se enfrentan a dificultades financieras debido a la pandemia y las consiguientes restricciones. La crisis originada por la Covid-19 ha llevado a una creciente demanda de ERTEs parciales a nivel global, para evitar la pérdida de empleos y mantener la viabilidad de las empresas.

Además, el ERTE parcial proporciona a las empresas una solución flexible y adaptable a las necesidades cambiantes del mercado laboral y la economía. La medida permite a las compañías ajustar la plantilla a la demanda de trabajo, reduciendo horas de trabajo y costes salariales sin tener que despedir a los trabajadores.

En resumen, el ERTE parcial es un mecanismo que permite a las empresas adaptarse a situaciones difíciles de manera temporal sin la necesidad de recurrir a los despidos. Esta herramienta constituye una alternativa flexible y adaptable a las condiciones del mercado laboral y se ha convertido en una solución común para abordar los efectos económicos de la pandemia.

Otros artículos sobre Contabilidad